Realizan allanamientos por doble homicidio en Arivana

Tras cuatro días del doble homicidio en Arivana, funcionarios del Cuerpo de Investigaciones Científicas Penales y Criminalisticas (Cicpc), continúan las indagaciones para capturar a los involucrados.

De manera extraoficial trascendió que una comisión del Cicpc han realizado varios allanamientos en domicilios relacionados con los implicados.

Uno de ellos, tuvo lugar en la urbanización Manoa, San Félix, allí consiguieron la camioneta Chevrolet Vitara, de color gris, en la cual los delincuentes hicieron el trasbordo para continuar su fuga en Castillito.

El otro vehículo, propiedad de la víctima, fue recuperado en la urbanización Orinoco, en la parroquia Cachamay, en donde los sabuesos también realizaron labores de investigación.

Cuatro presuntos responsables

Se conoce que hay cuatro presuntos involucrados en este suceso que conmocionó a Ciudad Guayana, aunque se estima que podría haber otros implicados.

Carlos Adrián Piñero, de 26 años, resultó abatido en un presunto enfrentamiento con las Fuerzas de Acciones Especiales (Faes) este viernes en Ciudad Bolívar.

Las autoridades refirieron que tendría relación con el doble homicidio en Arivana.

Por su parte, trascendió que habría otro sujeto detenido por el Cicpc, quien está ligado al caso. Sin embargo, no han ofrecido detalles sobre ello.

Dos aún se mantienen en fuga, siendo buscados por las autoridades.

Otra versión del suceso 

Extraoficialmente se supo que las víctimas Ronna Uzcátegui, de 51 años, y su hijo Alejandro Peña Uzcátegui, de 12, presuntamente conocían a sus victimarios.

Fuentes ligadas al caso, aseguraron que los homicidas le habían vendido anteriormente un freezer a Uzcátegui, el que posteriormente presentó fallas, por lo que tuvieron que ponerse en contacto nuevamente.

Cuando decidieron encontrarse en Castillito, los homicidios pusieron en marcha su plan.

La sometieron y obligaron a trasladarse hasta su vivienda en Alta Vista, dónde luego la amordazaron, maniataron y estrangularon junto a su hijo menor de edad. Posteriormente, incendiaron la casa para borrar evidencias.

Aunque algunas fuentes aseguraron que los delincuentes habían robado pertenencias de la casa, familiares de los fallecidos informaron que no se habían llevado ningún objeto.

Uzcátegui no era la propietaria de la vivienda incendiada. Trascendió que se hacía responsable del sitio mientras los dueños estaban fuera del país.

Las autoridades no han brindado mayores detalles sobre el caso, dado que las investigaciones siguen en curso y no se han esclarecido en su totalidad.

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