Matan a joven de 13 años en Las Batallas
En las afueras de la Clínica Humana, San Félix, estaban los familiares y allegados de Ángel Franco, de 13 años.
En sus caras era evidente el desvelo y la resignación por el suceso ocurrido la noche del domingo.
Cuentan que una vez que se enteraron de la noticia, buscaron la forma de auxiliar al menor de edad, pero ya era demasiado tarde.
Y es que el disparo que el joven recibió en la cabeza hizo que los médicos que lo atendieron por emergencias en el centro de salud privado, concluyeran que su estado fuese “reservado”.
A Franco lo trasladaron desde el sector Las Batallas, en San Félix, luego que su cuñado, de nombre Carlos José Bravo, de 35 años, accionara su arma de fuego en contra del estudiante.
Para la mala fortuna del adolescente, presenció una discusión fuerte entre su hermana y el homicida, quienes eran pareja.
El agresor estaría bajo los efectos del alcohol, por lo que se tornó violento, y comenzó a discutir con su pareja.
La discusión se volvió más acalorada llegando a la violencia en contra de la hermana mayor de Franco.
El joven, al presenciar que su familiar era agredida verbal y físicamente, trató de defenderla.
No pasó mucho tiempo para que Bravo terminara de perder los estribos y accionara su pistola.
Relato
Además de los gritos y las peleas, la tranquilidad de la noche en la calle Merecure, lugar donde ocurrió el asesinato, se vio interrumpida por un disparo.
“Yo estaba en mi casa tranquila tejiendo, cuando escuché un tiro”, cuenta una vecina.
La residente pensó que se trataba de alguno de esos delincuentes que ponen en jaque la pasividad de Las Batallas. Nunca se imaginó que el tiro vendría de la vivienda que está a pocos metros de la suya.
Carlos José, al estar consciente de su acto, no lo pensó mucho para huir de la escena del crimen, dejando atrás el cadáver de su cuñado, sobre un charco de sangre.
Los gritos de su hermana se intensificaron mientras que el homicida empacaba sus pertenencias para irse del lugar.
Cuando algunos de los vecinos se dieron cuenta del suceso ya era demasiado tarde. Bravo había escapado.
Justicia vecinal
Como una forma de hacer justicia por sus propias manos, un grupo de habitantes quemó el interior de la vivienda y rompió los vidrios y puertas de la casa.
Todavía se podía apreciar las cenizas y sangre seca en el piso temprano en la mañana del lunes. Antes de incinerarla, los habitantes de Las Batallas dieron la oportunidad a la hermana del infortunado de sacar sus pertenencias.
Funcionarios de Eje de Homicidios del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc), acudieron al sitio para colectar evidencias, así como entrevistar a los familiares.
Aparentemente, la mujer era víctima constante de los maltratados de Bravo, pero nunca se llegó a concretar una denuncia ante los organismos de seguridad.
Vecinos cuentan que la saña no era dirigida solamente contra la fémina, sino que anteriormente hubo problemas entre Carlos José y el muchacho de 13 años.
Franco pasó la noche en casa de su hermana, ya que su cuidado era compartido entre sus tres hermanas mayores, debido a que el joven era huérfano de padre y madre.
Pero debido a que los otros familiares que se encargaban de su resguardo no estaban en la zona, tuvo que pasar el domingo en Las Batallas.
Hasta ahora se desconoce la ubicación del atacante, por lo que los organismos de seguridad trabajan para dar con su ubicación.
Familiares y allegados del infortunado piden que se le capture y se haga justicia.
Maltrato
La hermana del fallecido era víctima constante de maltratos. Autoridades hacen un llamado a denunciar la violencia doméstica.
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