Miguel Moly pide disculpas a Viviana Gibelli

El reconocido cantante venezolano de tecnomerengue, Miguel Moly, reabrió el debate sobre las recientes polémicas que lo vincularon con la animadora Viviana Gibelli y que involucran directamente a su hijo, el también músico Jonathan Moly.

Durante su participación en el podcast de la periodista Rocío Higuera, el intérprete se mostró reflexivo y ofreció disculpas públicas a Gibelli, al tiempo que cuestionó las declaraciones de su hijo que, asegura, han afectado su imagen como padre.

La controversia se originó a raíz de ciertos comentarios hechos por su hijo en el podcast de Viviana Gibelli, los cuales fueron interpretados como una acusación de infidelidad y ausencia paterna.

Miguel Moly aprovechó la plataforma para dirigirse directamente a la animadora venezolana y zanjar el malentendido, asumiendo su parte de la responsabilidad en la escalada mediática.

“Si en algún momento ofendí a Viviana, le pido disculpas, no fue caballeroso de mi parte haberlo hecho, y lo bonito es reconocer las cosas que no están bien,” declaró Moly.

El artista enfatizó que no culpa a terceros por lo que se ha dicho, haciendo un llamado a la aceptación de las consecuencias: “Yo no puedo echarte la culpa a ti de lo que haya dicho mi hijo, dijo lo que tenían que decir y punto. Así que, bueno, disculpas por eso.”

En el podcast de Jonathan Moly, el merenguero reclamó a su hijo por sus respuestas ante las preguntas de Gibelli, que consideró como “poco profesionales”.

“Para ser entrevistador tienes que estudiar. Viviana Gibelli no puede entrevistar a nadie, porque las preguntas que hace, lo que hacen es hacer daño”, dijo Miguel Moly en ese momento.

“A mí ella nunca me gustó. Hay una especie de pique porque tu mamá ganó el Miss Venezuela donde ella participó, desde ahí no sé, no me tiene mucho cariño”, agregó.

La tensión con Jonathan Moly

El punto central de las declaraciones del cantante se centró en la relación con su hijo Jonathan y el manejo mediático de su vida personal. Miguel Moly expresó su dificultad para molestarse con su primogénito, pero sí lamentó el contenido de las entrevistas que, a su juicio, buscaron la confrontación.

“Es difícil molestarte con alguien que amas tanto, por las estupideces que puedan decir,” afirmó Moly. Detalló que, tras varias entrevistas, notó una tendencia negativa: “Vi que había mucha saña en las preguntas, no lo vi como un periodismo sano. Le pregunté a Jonathan por qué hizo eso, no supo qué decirme.”

El cantante lamentó profundamente que los comentarios hayan sembrado la idea de que fue un padre ausente. “Yo siento que fui un buen padre con él, no te imaginas el buen padre con él, estuve presente, y mi muchacho siempre conmigo, en los viajes, siempre fui extremadamente familiar, lo críe desde cero,” dijo visiblemente afectado. “Siento que con los comentarios que hace, la gente piensa que fui un padre ausente, y no fue así.”

Un matrimonio respetuoso

Miguel Moly aprovechó para desmentir categóricamente las acusaciones de infidelidad durante su matrimonio con Inés María Calero, madre de Jonathan.

“Su mamá disfrutó muchísimo, ningún tipo de sufrimiento tuvo su mamá, no hubo infidelidad, y si hubiera ocurrido hubiese pruebas, yo fui respetuoso con mi matrimonio”, aseguró.

El artista reveló que su exesposa, Inés María, también se siente dolida por la situación. “Ella está muy, muy molesta con Jonathan, está muy triste, qué necesidad hay de esto, nosotros somos amigos, Inés María y yo somos amigos,” y añadió sobre la percepción de su hijo: “Mi hijo pareciera tenerme desprecio y no lo entiendo.”

Moly cerró su intervención con un llamado directo a su hijo para tener una conversación privada y sincera, reafirmando su amor incondicional y su deseo de ser un padre accesible.

“Si me gustaría una conversación padre e hijo, sincera, por qué saca esos temas en público,” indicó, reiterándole la petición que ya le había hecho: “No hables de mí sin yo estar presente, eso no está bien.”

Pese al dolor, Moly concluyó con una declaración de amor y un consejo para su hijo: “Hijo te amo, no hagas más cosas que me hieran… vive tu vida, pero habla siempre de tu propia experiencia, nadie tiene derecho a juzgar a los demás”.