Dudamel: La música va más allá de escucharla, hay que sentirla

El reconocido director de orquesta venezolano Gustavo Dudamel y su esposa, la actriz y directora debutante María Valverde, visitaron la popular academia de Operación Triunfo en España, junto a integrantes del Coro de Manos Blancas de El Sistema, para promover su documental “El canto de las manos”. La producción audiovisual se centra en el poder transformador de la música para la comunidad sorda.

El documental, codirigido por la pareja, narra el proceso de preparación de la ópera “Fidelio” de Ludwig van Beethoven, la cual fue representada por primera vez en lengua de signos, rindiendo homenaje al compositor y a su propia sordera.

María Valverde explicó que la película nació de una necesidad vital para celebrar al compositor alemán a través de la lengua de señas: “Gustavo quiso celebrar a Beethoven a través de la lengua de señas, para poder celebrar al compositor, no solamente por su música sino por su condición. Tuvo la necesidad vital de llevarlo a cabo con el coro de Manos Blancas”.

La directora destacó que el proyecto es “una excusa para contar la realidad de las personas sordas y cómo la música les salva la vida, es inspiración, forma de vida, futuro, la música transforma vida. Esto es una historia llena de luz”.

Por su parte, Dudamel, quien es “hijo de El Sistema” —la institución venezolana que democratiza la música—, enfatizó que la obra demuestra que el arte va más allá de la audición.

“Beethoven es ejemplo de genialidad, de sufrimiento, pero también de mucha fortaleza, ser músico y quedar sordo, también nos muestra que la música va más allá de escucharla, sino sentirla,” afirmó el director venezolano, añadiendo que “esa búsqueda fue lo que nos llevó a hacer esta locura, es una locura hacer de una música que escuchamos, sentirla”.

Integración y transformación social

El documental, filmado en Venezuela y Los Ángeles, subraya el componente social del Coro de Manos Blancas. Valverde señaló que fue “hermoso ver cómo les cambió la vida y cómo ellos mismos cambiaron su futuro”.

Dudamel insistió en la misión integradora del arte. El maestro recordó que tuvo la oportunidad de dirigir la fundación de este coro en 1996, proceso que no se trata de inclusión, sino de integración.

“La misión va mucho más allá del simple hecho de entretener, tenemos un poder muy grande en nuestras manos, en nuestras voces, de transformar, la música es una expresión del arte que tiene muchas dimensiones, hay que ver más allá de esas notas y lo que produce en nosotros”, sostuvo.

El director instó a mirar más allá de la perfección técnica y enfocarse en la experiencia humana. “Yo creo que es fundamental, la mayoría de los grandes compositores era ese mundo individual para transformarlo en colectivo. Tenemos que enseñarle al mundo, tan diverso, tan dividido, tener esa misión de unir a través de la belleza”, concluyó Dudamel sobre el mensaje central del proyecto, que ya ha sido nominado a mejor documental musical por la International Documentary Association.