Talibanes festejan su victoria tras salida de los últimos soldados de EEUU de Afganistán
Los talibanes celebran este martes su victoria en Afganistán tras la salida de los últimos soldados estadounidenses, que pone fin a 20 años de una guerra devastadora y abre un nuevo capítulo para este país, marcado por una gran incertidumbre.
La retirada estadounidense ha sido calificada de éxito “histórico” por los talibanes, que se hicieron con el control de Kabul el 15 de agosto y depusieron al gobierno afgano tras una rapidísima ofensiva en todo el país.
Los estadounidenses intervinieron en Afganistán en 2001, liderando una coalición internacional que tenía por fin derrocar a los talibanes, que se negaban a entregar al líder de Al Qaida, Osama Bin Laden, tras los atentados del 11 de septiembre en Estados Unidos.
“Felicitaciones a Afganistán (…) Esta victoria nos pertenece a todos”, declaró Zabihullah Mujahid, portavoz de los islamistas desde el aeropuerto de Kabul, controlado hasta horas antes por las fuerzas estadounidenses.
“Esta es una gran lección para otros invasores y para nuestras futuras generaciones” y “también es una lección para el mundo”, dijo Mujahid. “Es un día histórico, un momento histórico y estamos muy orgullosos”, agregó.
Las imágenes de los líderes talibanes caminando victoriosos por los hangares del aeropuerto, escoltados por milicianos armados que ondeaban la bandera blanca del movimiento, mientras posaban para las cámaras, al lado de los helicópteros destruidos por los estadounidenses antes de dejar el país, resumían perfectamente la situación de Afganistán este martes.
En la ciudad de Kandahar, la segunda del país y bastión de los pastunes, etnia a la que pertenecen la mayoría de los talibanes, también hubo manifestaciones de alegría en las calles.
“Hemos derrotado a la superpotencia. Afganistán es el cementerio de las grandes potencias”, clamaban hombres armados.
Desde que tomaron el poder, los islamistas se han esforzado en dar una imagen conciliadora y abierta y prometieron no vengarse de las personas que trabajaron con el gobierno precedente.
“Queremos buenas relaciones con Estados Unidos y el mundo”, garantizó Zabihullah Mujahid este martes.
Regusto amargo
Tras dos semanas de evacuaciones precipitadas y por momentos caóticas, el último avión de transporte militar C-17 despegó del aeropuerto el lunes a las 19H29 GMT, justo antes de la medianoche en Kabul, dijo en Washington el general Kenneth McKenzie, que dirige el Mando Central estadounidense, del que depende Afganistán.
La retirada estadounidense se concretó 24 horas antes de la fecha límite fijada por el presidente Joe Biden, para quien este día tendrá un regusto amargo.
El mandatario, que justificó su decisión de retirar las tropas diciendo que no quería que la guerra perdurara, se dirigirá el martes a sus conciudadanos en un discurso difícil ya que muchos estadounidenses se preguntan para qué han servido estas dos décadas de presencia en Afganistán.
Aunque el objetivo de terminar con Bin Laden se cumplió el 2 de mayo de 2011, cuando las fuerzas especiales norteamericanas mataron en Pakistán al líder de Al Qaida, Estados Unidos siguió en Afganistán, sobre todo para formar a un ejército afgano que se esfumó rápidamente ante el avance de los talibanes.
En total, Estados Unidos ha registrado 2.500 bajas y ha tenido que pagar una factura de 2,3 billones de dólares en 20 años, según un estudio de la Brown University.
Además, el país sale de Afganistán con una imagen enturbiada por su incapacidad para prever la rapidez de la victoria de los talibanes y por la manera en que se organizaron las evacuaciones.
Ten la información al instante en tu celular. Únete al grupo de Diario Primicia en WhatsApp a través del siguiente link: https://chat.whatsapp.com/IRw6IXFYgK25m8tLpx3lKk
También estamos en Telegram como @DiarioPrimicia, únete aquí: https://t.me/diarioprimicia