Murió el destacado director de cine Peter Bogdanovich
El prodigioso director Peter Bogdanovich ha muerto en su casa de Studio City, California, a los 82 años de edad. Considerado uno de los niños prodigio de los años setenta, entre sus títulos como cineasta destacan ‘La última película’, ‘¿Qué me pasa, doctor?’ y ‘Luna de papel’.
«Las películas solían ser algo poderoso cuando no se buscaba vender productos. Ahora se trata de colocar productos para vender y no de hacer una buena película. El cine lleva tiempo en decadencia. Ya no se hacen películas originales; todo son precuelas, repeticiones y una obsesión por vender productos como los superhéroes. A mi no me gusta ese cine», confesó en 2019 durante la promoción de su documental sobre Buster Keaton.
La película también ganó en las categorías a mejor actor principal y mejor actriz para Ben Johnson y Cloris Leachman, además de otras cuatro nominaciones.
Prolífico y celebrado, fue uno de los cineastas más importantes del Nuevo Hollywood de los 70, un hombre que siempre vio cómo su vida personal amenazaba su carrera tras las cámaras sumando un escándalo tras otro.
Siendo director se relacionó sentimentalmente con dos de sus protagonistas principales; la primera por quien dejó a su esposa, la segunda, una actriz de Playboy asesinada luego por su esposo.
Erudito defensor de los cineastas estadounidenses de la vieja escuela, fue íntimo amigo de Orson Welles y su colaboración fue fundamental para estrenar su último trabajo ‘Me amarán cuando esté muerto’ en Netflix.
«A Orson le encantaba quedarse en el hotel Ritz de Madrid, pero cuando se pusieron de moda los rodajes en España, y todo Hollywood se quedaba en el Ritz de Madrid, él se molestó muchísimo”, contó.
“Estuve con Orson en un viaje a España y me llevó al Prado, al museo del Greco, que me encantó, y a un restaurante pequeño y maravilloso donde me dieron sesos, sin que yo lo supiera, en ese momento lo disfruté mucho, pero cuando me dijo Orson lo que había comido casi me enfermó. Jamás he vuelto a probar los sesos», confesó Bogdanovich.
Al igual que sus compañeros de la Nueva Ola francesa, Bogdanovich aprovechó su carrera para escribir crítica de cine y actuar. Formó parte de la primera generación de entendidos del cine convertidos en directores que se criaron en el lenguaje cinéfilo.
Una raza que incluía al joven Spielberg y, más tarde, a Quentin Tarantino.
«A mí me encanta la comedia, es mi género favorito. Mi padre solía llevarme al Museo MoMa de Nueva York a ver las películas de Keaton y Charlie Chaplin. Él era mucho más mayor que mi madre y había crecido viendo películas mudas, le encantaba llevarme a la sesión de las seis de la tarde porque quedaba muy cerca de nuestra casa». A lo largo de su infancia, vería hasta 400 películas al año, registrando cuidadosamente sus opiniones en una tarjeta de notas.
Francis Ford Coppola y Scorsese reclutaron a Bogdanovich para que trabajara como su asistente de dirección en ‘Los ángeles del infierno’ de 1966. La experiencia resultaría ser un curso acelerado de cine para el novato veinteañero y allanaría el camino para su gran estreno de 1971, ‘La última película’.
La película fue el trampolín para actores emergentes como Jeff Bridges, Ellen Burstyn, Randy Quaid y Cybill Shepherd, mujer por la que Bogdanovich dejaría a su esposa y socia profesional, Polly Platt.
Más de sus éxitos
El éxito le dio a Bogdanovich la oportunidad de elegir su siguiente proyecto ‘¿Qué me pasa, doctor?’. La cinta fue protagonizada por dos de las estrellas más importantes del momento, Barbra Streisand y Ryan O’Neal, y se convertiría en la tercera más taquillera de 1972, después de ‘El padrino’ y ‘La aventura del Poseidón’.
Su siguiente filme fue ‘Luna de papel’ (1973) que volvió a unir al director con Ryan O’Neal y por la que ganó un Oscar la hija de O’Neal, Tatum, que tenía 9 años en el momento del rodaje.
Su suerte se congeló con ‘Una señorita rebelde’, que fue recibida con terribles críticas y marcó el comienzo de la caída en picado de la reputación de Bogdanovich. Siguieron dos fracasos más, ‘Por fin, el gran amor’ (1975)y ‘Así empezó Hollywood’ (1976).
Una comedia que marcó su carrera
En 1981 estrenó en Venecia la comedia ‘Todos rieron’, un legado cinematográfico agridulce que moldeó la vida de Bogdanovich tanto personal como profesionalmente.
Por un lado era una pieza de humor romántico sobre detectives privados, por otro representa una carta de amor a su amante de entonces, la conejita de Playboy Dorothy Stratten, asesinada por su esposo al descubrir su infidelidad.
Una película de género que demuestra la nostalgia del cineasta por artistas como Ernst Lubitsch o Howard Hawks, con la melancolía romántica identitaria del realizador.
Bogdanovich nació de un padre pianista serbio (Borislav) y una madre pintora austríaca (Herma), ambos llegaron a Kingston (Nueva York) desde Europa en el año del nacimiento de su hijo, 1939.
En los años 50, Bogdanovich estudió actuación con Stella Adler junto a Marlon Brando y Robert De Niro. Un cinéfilo obsesivo, programó películas en el Museo de Arte Moderno de Nueva York a principios de los años 60 y se mudó a Los Ángeles con su esposa Polly Platt en 1968 con la intención de convertirse en cineasta.
Los artículos cinematográficos que escribió para la revista ‘Esquire’ terminaron en un libro titulado ‘Piezas de tiempo’ (1973).
En años posteriores publicaría otros libros sobre cine, entre ellos ‘Ciudadano Welles’ (1992); ‘Who the Devil Made It: Conversations With…’ (1997), que incluía entrevistas con Hawks, Hitchcock y George Cukor; y ‘Quién diablos está en esto: Conversaciones con actores legendarios’ (2005). En total, escribió más de una docena de libros, mientras que su documental, ‘Dirigida por John Ford’ (1971), se presentó en el Festival de Cine de Nueva York el mismo año que estrenó ‘La última película’.
Entre sus últimas películas se encuentra ‘Lío en Broadway’ (2014), protagonizada por Jennifer Aniston, sobre un director de Broadway que se enamora de una prostituta convertida en actriz.
Este sabio del cine comenzó su carrera programando películas para el Museo de Arte Moderno y escribiendo sobre películas para ‘Esquire’ antes de mudarse a Los Ángeles a fines de la década de 1960 e ingresar en la industria.
Actor de ‘Los Soprano’, en su última entrevista con ABC confesó que le gustaban las películas de Wes Anderson y poco más. «Yo protagonicé ‘Los Soprano’, la mejor serie que se ha hecho en la televisión, esa fue la edad de oro. Ahora, ya no veo la televisión ni películas de cine».
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— EL PAÍS (@el_pais) January 6, 2022
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