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Erick deja un niño fallecido en México

Las autoridades reportaron aludes, carreteras bloqueadas, líneas eléctricas caídas y algunas inundaciones tras el paso del huracán Erick.
Por: AP
viernes, 20 junio 2025
Erick
Cortesía | Los pescadores buscaron botes sacudidos

En medio de persistente lluvia sobre el puerto de Acapulco, residentes y algunos turistas salieron el jueves por la noche a caminar o visitar los pocos negocios abiertos mientras la depresión tropical Erick avanzaba por el sur de México, dejando a su paso deslaves, bloqueos de carreteras, crecidas de ríos y al menos un niño fallecido.

Por la mañana, Erick tocó tierra como huracán de categoría 3 en una franja de costa escasamente poblada entre Acapulco, en el estado de Guerrero, y Puerto Escondido, en el de Oaxaca, dos ciudades turísticas con litoral en el Pacífico. Las autoridades reportaron aludes, carreteras bloqueadas, líneas eléctricas caídas y algunas inundaciones.

Después de que el huracán Otis devastara Acapulco en 2023, en esta ocasión los residentes de la ciudad se tomaron la tormenta muy en serio y pudieron sobrellevarla mejor. En Puerto Escondido, los pescadores buscaron e inspeccionaron botes sacudidos por el meteoro.

Amenazas de lluvias

La amenaza de fuertes lluvias permanecía en las montañas que se elevan abruptamente detrás de las famosas playas de Acapulco. Erick pasó el día desplazándose a través de la cordillera costera, dejando caer cantidades torrenciales de lluvia. Se tenía previsto que se disipara el jueves por la noche sobre las montañas en el estado de Michoacán, ubicado hacia el occidente.

El secretario de Gestión Integral de Riesgos y Protección Civil de Guerrero, Roberto Arroyo, dijo a The Associated Press que un niño de 1 año murió en el municipio costero de San Marcos, en el sur del estado, cuando su madre intentaba cruzar un río crecido y el menor se le fue de las manos.

Erick llegó a tener fuerza de categoría 4

El Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos (NHC, por sus siglas en inglés) indicó que Erick se ubicaba a unos 95 kilómetros (60 millas) al norte-noroeste de Acapulco el jueves por la noche. Sus vientos máximos sostenidos eran de 55 kilómetros por hora (35 millas por hora), por lo que ahora su fuerza era de depresión tropical. Se movía hacia el noroeste a 19 km/h (12 mph).

Erick se había fortalecido a una tormenta de categoría 4 al acercarse a la costa, pero se debilitó a la categoría 3 antes de tocar tierra.

Después de duplicar su fuerza en menos de un día, el meteoro avanzó a través de un entorno ideal para una rápida intensificación. El año pasado, hubo 34 incidentes de intensificación rápida, que se produce cuando una tormenta gana al menos 56 km/h (35 mph) en 24 horas, lo cual es aproximadamente el doble del promedio y dificulta los pronósticos, según el NHC, con sede en Miami.

No se reportan heridos

La presidenta Claudia Sheinbaum agradeció el jueves a la población por “atender las recomendaciones de Protección Civil”.

La coordinadora nacional de Protección Civil, Laura Velázquez, dijo el jueves que por el momento no había reportes de heridos. El agua entró en un hospital público en el destino turístico de Huatulco, Oaxaca, localidad en la que hubo árboles caídos, cortes de energía y aludes que bloquearon carreteras.

Las autoridades advirtieron que ahora el problema eran las fuertes lluvias.

La gobernadora de Guerrero, Evelyn Salgado, instó el jueves a los residentes de su estado a no bajar la guardia después de que Erick tocara tierra en la vecina Oaxaca.

“En Guerrero seguimos en máxima alerta. Erick aún representa un peligro por las lluvias intensas que puede dejar en nuestro estado durante las próximas horas”, señaló.

Acapulco aún marcado por Otis

Los residentes de Acapulco se prepararon para la llegada de Erick con mayor ahínco y temor debido al recuerdo de la devastación causada por Otis.

La ciudad de casi 1 millón de habitantes fue devastada en octubre de 2023 por el huracán Otis, de categoría 5, que se intensificó rápidamente y tomó a muchos desprevenidos. Al menos 52 personas murieron, y la tormenta dañó gravemente casi todos los hoteles.

El jueves por la mañana, Marcial Gallardo, un mesero de 60 años, se metió en el agua de la bahía de Acapulco para darse un chapuzón rápido con su hijo. Indicó que se mete a nadar todos los días. Gallardo comentó que había asegurado todo antes de la llegada de Erick luego de que Otis destrozara su hogar, y hasta ahora le había ido bien.

Había una fuerte presencia de la Guardia Nacional y la policía el jueves en las avenidas de Acapulco. Por su parte, cuadrillas de la Comisión Federal de Electricidad trabajaban para limpiar los canales de drenaje y retirar la maleza.

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