Tres médicos lo declaran muerto y “resucitó” justo antes de la autopsia

Gonzalo Montoya Jiménez, quien se encontraba preso en el Centro Penitenciario de Asturias, en España, fue dado por muerto, pero durante la autopsia descubrieron que estaba vivo.

Fue encontrado inconsciente y sin signos de vida en su celda en 018, pero en las últimas horas el caso recobró relevancia tras viralizarse por su sorprendente desenlace.

Montoya, quien tenía 29 años, fue declarado muerto por error y sacado de la cárcel en una bolsa para cadáveres para una autopsia, según informó el Daily Mail.

Además, la familia del hombre fue informada sobre su “fallecimiento”. Sin embargo, durante el estudio, un patólogo escuchó ruidos “raros” que provenían del recluso.

Justo antes de que lo abrieran, el hombre comenzó a jadear, por lo que el médico debió alertar a las autoridades.

Según contaron los agentes, el hombre fue llevado a la autopsia “sin presencia policial, porque en ese momento se pensó que estaba muerto” y se actuó de acuerdo con los protocolos.

En cuanto desde la morgue alertaron a las autoridades, se solicitó ayuda policial para llevarlo al centro de salud y vigilarlo. Montoya fue trasladado a un hospital en la ciudad de Oviedo.

La explicación del Servicio Penitenciario

Un portavoz del Servicio Penitenciario español explicó que “dos médicos de la prisión concluyeron que tenía signos clínicos de muerte después de pasar lista por la mañana e informaron a la policía, a sus familiares más cercanos y a un tribunal de guardia local como parte del procedimiento estándar”.

Añadió: “el tribunal envió a un médico forense que fue quien realmente confirmó su muerte. Tres médicos han visto signos clínicos de muerte, por lo que todavía no está claro exactamente por qué ocurrió”.

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