¿Qué plantas absorben la humedad de casa?

El exceso de humedad en el hogar no solo es un problema que afecta al estado de nuestra vivienda sino que puede provocar consecuencias negativas para nuestra salud, sobre todo, en personas con problemas respiratorios como el asma.

En este sentido, te presentamos 5 plantas que absorben la humedad de la casa.

Lirio de la paz o Spathiphyllum Wallisii

El Spathiphyllum Wallisii también es conocido por los nombres de Cuna de Moisés, lirio de la paz, vela del viento, bandera blanca o espatifilo. Esta planta es muy adecuada para absorber la humedad a través de sus hojas y, además, purifica y elimina el ambiente de tóxicos.

Requiere bastante riego. La tierra ha de mantenerse siempre húmeda, sobre todo durante el crecimiento, y en invierno, reducirlo. Requiere ser pulverizada con frecuencia para aportarle esa humedad ambiental que demanda. Exige bastante luz para poder crecer y florecer, aunque puede sobrevivir en zonas poco iluminadas y es que es una de las pocas plantas de interior que florece durante todo el año.

Palmera bambú:

A la Palma Areca se le conoce también por los nombres de Palmera bambú y Palmera de frutos de oro.

Palma de bambú:

Como planta tropical que es necesita de ambientes húmedos. Puede ocurrir que las hojas se le empiecen a secar si no tiene la suficiente humedad. Además de absorberla, es una planta purificadora en el hogar ya que elimina los tóxicos que hay en él.

Aunque su crecimiento es bastante lento, si se encuentra en buenas condiciones, puede llegar a alcanzar los 2 o 3 metros. No necesita una luz excesiva.

Helecho rizado o Nephrolepis exaltata:

Al Nephrolepis exaltata se le conoce por los nombres de Helecho rizado, helecho espada, helecho de Boston y Nefrolepis. Necesita de ambientes húmedos para que tenga un buen porte y lustrosidad. En ambientes secos, de hecho, no se va a desarrollar tan bien.

Nephrolepis exaltata:

Hemos de mantener el sustrato húmedo, nunca empapado, y en invierno espaciaremos los riegos, aunque nunca dejaremos secar la tierra. Como a la mayoría de los helechos, les gusta los lugares luminosos (nunca el sol directo) pero también soportan bien cierta penumbra.

Sus largos frondes, estrechos y subdivididos se arquean, lo que da una gracia y elegancia única. Además, unido a su fácil cultivo hace que sea una de las elecciones más acertadas y popular.

Cinta o Chlorophytum comosum:

Al Chlorophytum comosum también se le conoce por los nombres de cinta, malamadre, araña y lazo de amor.

Chlorophytum comosum:

Es muy fácil de reproducir y de cuidar. De hecho, es una planta recomendada para principiantes o para aquellos que tengan poca mano con ellas.

Absorben la humedad de ahí que sea muy habitual verlas en los cuartos de baño o cocinas. Es recomendable pulverizarla de vez en cuando, sobre todo, en verano. Si observáis que tiene las puntas secas, puede deberse a un exceso de sol (nunca directo) o a una falta de humedad.

Hiedra:

La hiedra es una planta perfecta para mantener el ambiente libre de de moho producido por humedades de condensación. Las hiedras toleran exposiciones no excesivamente luminosas aunque su desarrollo óptimo lo tienen en condiciones de luz abundante, sin sol directo.

La tierra ha de mantenerse húmeda pero sin abusar. Para potenciar el brillo propio de las hojas es aconsejable rociarlas regularmente con agua tibia. Además, es aconsejable los días de lluvia sacarlas al exterior para que se mojen copiosamente. El agua de lluvia las limpia y sanea de posibles plagas que se adhieren a las hojas.