Por esta razón deberías borrar números de contacto antiguos en WhatsApp

Como cuando tenemos fotos viejas que ocupan espacio, siempre resulta de utilidad realizar una limpieza de vez en cuando. Con los contactos pasa un poco lo mismo, ya que puede ser que los que sean antiguos hayan cambiado de número y sean personas que no conoces, lo que puede traerte algún problema.

Muchos operadores pueden reutilizar números que antes pertenecían a otras personas. Esto puede ser por varios motivos, desde que la persona lo haya dado de baja o porque el propio operador simplemente lo ha desactivado, lo que quiere decir que un número de un contacto tuyo puede pertenecer a alguien que no conoces.

En WhatsApp, dicho número aparecerá con el nombre del contacto que tú tenías guardado antes. Aunque nunca hayas hablado con él, en tu móvil se mostrará con el nombre de ese contacto, que puede ser perfectamente a un amigo o un familiar, y que ahora pertenece a una persona desconocida.

Por lo que, cuando un amigo o una persona que conoces te notifica que se va a cambiar de número, es mejor que ese lo borres y te agregues el nuevo para evitar cualquier tipo de problema en relación con tu privacidad.

Eliminar el contacto desconocido

Puedes eliminar el contacto de la manera tradicional desde la agenda o desde WhatsApp yendo la pestaña de chats y pulsando el icono para abrir un nuevo chat. Ahí busca al contacto que quieras eliminar y al seleccionarlo se abrirá un chat con esta persona. Una vez aquí, y dependiendo del sistema operativo que tengas, se hace de una manera o de otra.

En Android tienes que tocar el nombre del contacto y en el icono de los tres puntos de la esquina superior derecha, después dirígete a ‘ver en la libreta de contactos’, toca en el icono de los tres puntos y selecciona ‘eliminar’. En cambio, en iOS simplemente tienes que pulsar en el nombre de contacto situado en la parte superior, tocar en ‘editar’ y dentro de editar, seleccionar ‘eliminar contacto’.

Con esto podrás ahorrar mucho espacio en tu móvil y realmente tener en tu agenda de contactos a las personas con las que hablas o en algún momento sabes que vas a volver a hablar. En resumen, que sean de utilidad y no tener a nadie desconocido.