Sur de Bolívar sufre la falta de gasolina

La situación que padecen los pobladores de municipios al sur de Bolívar, por la falta de combustible, nuevamente es denunciada.

Al no haber gasolina, se paralizan las actividades económicas, clases, entre otras jornadas, perjudicando a la ciudadanía que exige soluciones definitivas.

En el caso de Roscio, el dirigente social Darío Graffe expresó que los días se tornan difíciles, pues cuentan hasta una semana en las colas.

“Hay casos en los que la gente pasa ocho días porque no hay despacho por parte de Pdvsa”, dijo Graffe.

Agregó que es una falta de “políticas serias”, ya que “no tiene lógica pasar tanto tiempo en las colas para solo recibir 20 litros de gasolina”.

Reclamó que existe un negocio con el carburante, mientras que los ciudadanos sufren las penurias.

“Esto es inaudito, un país rico en hidrocarburos y este Gobierno nefasto condena a sus pobladores a pasar humillaciones y maltratos por militares”, señaló Víctor Villegas, procedente de El Callao.

Odisea
Turistas, transportistas y quienes por diferentes motivos viajan hacia el sur, incluso a Brasil, están en riesgo de quedarse varados en las carreteras.

José Carlos Martínez frecuenta la ruta a Santa Elena y aseguró que no existe control. “No hay un plan serio y organizado que garantice el despacho de combustible en la zona. El sector productivo de la región se encuentra paralizado, el agricultor, el ganadero y el minero, quienes hacen el desenvolvimiento económico, al igual que el sector transporte”, recalcó.

Martínez señaló como “ilógico” no haya gasolina en estaciones de servicio, “pero a lo largo de la Troncal 10 la venden al aire de libre, sin que los organismos de seguridad hagan algo”.

En Upata
Por otra parte, las consecuencias para el transporte en Upata son resueltas “a la antigua”.

Habitantes de Santa Rosa, Fin de Mundo, Caratal y La Masusa, entre otros caseríos del asentamiento rural El Buey, alegan que nunca han contado con un servicio de transporte óptimo y menos ahora con los problemas del combustible.

Ante la ausencia de unidades, se trasladan en burros y caballos.

Carlos Vieira declaró que “el problema del combustible es tan grave que afecta a los habitantes de la comunidad; como no hay muchas unidades, usan estos medios para movilizarse”.

Otros se ven limitados para salir a la capital piarense, por el elevado costo del pasaje, además ya la gente no da “la cola”, sostuvo Vieira, quien precisó que se hace muy complicado hacer diligencias.

“Por ejemplo, salir de Fin de Mundo es un desafío: se camina hasta llegar al centro de El Buey para esperar una camioneta o buscar la manera de llegar a Upata”, cerró.

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