Profesores universitarios exigen ajuste salarial desde las calles

En respuesta a la convocatoria nacional, el gremio de profesores universitarios se concentró en la plaza Monumento a la CVG en Alta Vista de Puerto Ordaz, en unión al clamor de ajustes salariales y la reivindicación del resto de beneficios.

A pocas semanas del regreso a las aulas de clase, Raúl Brito, presidente de la Asociación de Profesores de la Universidad Nacional Experimental de Guayana (Apuneg), precisa que no cuentan con las condiciones mínimas.

Están sin transporte, comedor, instalaciones por el suelo, laboratorio sin dotaciones, falta de aires acondicionados, no hay becas, ni marcadores, entre otros, completamente desasistida.

Menciona como ejemplo que un trabajador universitario para movilizarse en el transporte público tendría que gastar 400 bolívares mensuales que no percibe.

Brito precisa que el profesor titular con doctorado de máxima jerarquía tiene un salario de Bs. 545 y en promedio los profesionales devengan un sueldo de Bs. 300, administrativos Bs. 200 y obreros Bs. 150.

“El gobierno quiere dejar una imagen de que está invirtiendo en la educación, pero realmente está acabando con ella”, denuncia el profesor.

Compara que en 1999 el salario que percibían era de 2000 dólares y a la fecha solo reciben escasos 15 dólares, tras arrojar cifras preocupantes, de 45 mil profesores universitarios con títulos de maestría y doctorado solo quedan alrededor de 10 mil.

Brito asegura que se mantendrán en la calle para exigir sus derechos, también se habla de ayunos en protesta, debido a que han transcurrido más de 500 días sin incremento salarial, pues las bonificaciones no tienen incidencia en el salario.

Universitarios unidos

También estuvieron presentes, representantes de la Universidad de Oriente (UDO), Universidad Nacional Experimental Politécnica Antonio José de Sucre (Unexpo), Universidad Nacional Experimental de Guayana (Uneg), representación sindical de las Empresas Básicas, jubilados y Colegio de Enfermeras de Caroní.

Manuel Salazar, secretario general del sindicato obrero de la Unexpo, se dirige al Gobierno nacional para recalcar que los profesionales que se mantienen en protesta no son delincuentes, sino trabajadores que exigen lo establecido en el artículo 91 de la Constitución y la defensa no solo de los derechos laborales, también por el rechazo de los atropellos a las dirigentes sindicales.

Por su parte, Albert Villarroel, secretario de contratación colectiva del sector administrativo de la Uneg, está convencido que unificados es la única forma que pueden luchar.

Explica que el sector de los maestros no asistió al encuentro, a describirlos como uno de los sectores más importantes y quienes han realizado grandes movilizaciones desde enero de este año.

“El Gobierno se dio a la tarea de presionar y coaccionarlos suspendiendo sus salarios a una gran cantidad de ellos, pero nosotros seguiremos impulsando la lucha”, reitera.

Recuerda que hay trabajadores con medidas cautelares que les impide unirse a las concentraciones y recuerda el caso de John Álvarez, estudiante de la Universidad Central de Venezuela detenido recientemente.

“A este país se le ha desmantelado todo a los dirigente estudiantiles de la universidades porque fueron ellos en algún momento quienes plantearon la lucha en la calle”, destaca Villarroel.

Rubén González, al frente de la Intersectorial de Trabajadores de Guayana (ITG), hace hincapié que hay una convención colectiva que determina que los maestros, docentes y todos los dirigentes sindicales de los diferentes gremios con mucho impulso lograron plasmar en cada una de las cláusulas los beneficios generales.

“Es lo que queremos, que se pueda dar asignación de un salario digno y suficiente”, acota.

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