En Puerto Libre tienen días sin dormir por la cárcava (+video)
Por las fuertes lluvias registradas en días recientes, los habitantes de Puerto Libre -en Castillito- se mantienen en zozobra por el derrumbe constante de tierra en la cárcava.
El descontento de los vecinos por la ausencia de las autoridades es general, pues fueron muy puntuales al mencionar que no reciben visitas de los entes competentes ni el apoyo del consejo comunal.
“Nosotros tenemos días que no dormimos, cada vez que llueve se van los pedazos”, lamenta Trinidad Rodriguez, tras calcular que siete metros de terreno cedieron este jueves en la noche.
Otra de las preocupaciones que señalan los afectados es el peligro de una mata de mango de unos 15 metros de altura a medio metro del borde, a pesar que Rodríguez ha llamado a Protección Civil Caroní, les explican que no tienen los recursos y la comunidad debe solicitar un permiso en la Alcaldía de Caroní para cortar el árbol.
Cabe destacar que el pasado martes 1 de noviembre en el aniversario XVI de PC Caroní recibieron de la mano del mandatario municipal Tito Oviedo, dotación de uniformes, herramientas y unidades para atender a la población.
Más de 20 familias están en peligro y es “como si Puerto Libre no le duele a nadie”, confiesa Rodríguez y se sienten ignorados; este 11 de noviembre exigió a la Gobernación del estado Bolívar sean atendidos.
Al límite
En la casa de Yoleida Amayz viven seis personas, entre ellas el primo de su esposo con discapacidad.
Amayz se mudó a Puerto Libre hace dos años huyendo de las inundaciones en la vía El Pao que acabaron con su cosecha y buscar un mejor futuro para sus morochas de 18 años, sin embargo, encontró otro problema que enfrentar.
El suelo de la casa de Amayz se escucha hueco, un indicio que el terreno está debilitado.
Relleno por la misma comunidad
José Cedeño asegura que el socavamiento comenzó hace 30 años y en todos los gobiernos que han pasado ha sido igual de promesas incumplidas.
“Los recursos los bajaron en la gestión de Rangel Gómez en 2007 y nunca hicieron nada para el embaulamiento”, subraya.
Con esfuerzo, Cedeño se ha encargado de rellenar unos 40 metros desde la avenida hasta la cárcava con apoyo de aquellas personas que están en construcción y depositan los escombros en este sitio, “yo los recibo para salvar el terreno”.