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La evolución de la educación: Tecnología, actualización y el ser crítico

El decano de la facultad de Humanidades y Educación de la Ucab, José Francisco Juárez, explica los elementos necesarios para seguir construyendo el sector educativo en el país y la participación de la universidad. 
jueves, 20 enero 2022
Cortesía | La Ucab planea internacionalizar los pensum de las carreras como incentivo y oportunidad de las clases virtuales

“Un pie en la realidad y un pie en el futuro”, es el planteamiento del decano de la facultad de Humanidades y Educación de la Universidad Católica Andrés Bello (Ucab), José Francisco Juárez, con respecto a la gestión que realiza la casa de estudio. 

Hace hincapié en la importancia de la participación educativa en el desarrollo de un país democrático y la relevancia del profesional egresado como parte del motor económico y social.

A raíz de la realidad actual, se implementa el uso de la tecnología y su relación con la educación, tomando en consideración la modalidad virtual, a distancia y con presencialidad remota. 

Según el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), América Latina y el Caribe es una de las regiones donde hay mayor desigualdad en tecnología, debido a los costos de los artefactos tecnológicos y servicios, lo que genera menor preparación en infraestructura digital y, a su vez, deficiencias en el aprendizaje remoto. 

“Si no se analiza la importancia de la tecnología en la educación, o se hace lo posible por incorporarla en los planes de estudio, las instituciones están condenadas al fracaso”, apuntó el decano. 

Señaló la necesidad de financiamientos y de políticas públicas que se enfoquen en actualizar los planes de estudios y la implementación de equipos y materiales tecnológicos para el desarrollo estudiantil. 

Con respecto a ello, la Unidad Democrática del Sector Educativo (Udse) precisó que 27,8 % de los estudiantes se vio afectado por la desigualdad social y económica que generó su exclusión escolar durante la pandemia. 

Además de ello, las instituciones públicas no solo son perjudicadas por la falta de implementación de tecnología, tomando en cuenta la educación actual, sino también por la falta de infraestructura, formación docente y salarios aceptables. 

Aunado a la desactualización de los planes de estudios y carreras tanto en educación básica, como media y superior. 

Juárez explicó que los planes y programas de estudios de educación media no se actualizan desde los años 70; mientras que en los 90’ se intentó una actualización y modificación que no trascendió. 

“No hay, desde el punto de vista institucional, un plan que especifique las acciones y actividades que se deban implementar para una ruta de trabajo acertada y actual”, dijo. 

Indicó que la pandemia fue “el empujón” para buscar actualizar los planes de trabajo, recordando que la educación por medio de la tecnología no tiene que ser de mala calidad, siempre y cuando se realice la planificación adecuada para ello, porque sino, “estará destinada al fracaso”.  

“La tecnología es una aliada de la educación” y se debe utilizar para poder seguir formando a los estudiantes. 

Prácticas de reinserción académica

Con respecto a la Ucab, manifestó que “no se puede regresar a las aulas de clases igual que antes, porque ya tenemos una experiencia relacionada con la tecnología y tenemos que aprovecharla”.

El decano admitió que los docentes en las clases virtuales de la institución académica, al inicio, no cambiaron su manera de educar, sino el medio por el cual lo hacían, pero ahora se han adaptado a las plataformas tecnológicas y han hecho modificaciones en sus actividades. 

Con motivos de evolución y adaptación a la realidad virtual y tecnológica de la actualidad, comentó la necesidad de crear carreras más cortas y títulos de técnicos superior universitarios, con formación integral y asertiva, que incentiven a los estudiantes de 4to y 5to año de bachillerato a continuar sus estudios académicos. 

Para ello, la Ucab ha planteado ante el Consejo Universitario y enviado al Consejo Nacional de Universidades, del Ministerio de Educación Superior, la implementación de los Técnicos Superior Universitarios, dentro del plantel.

Por los momentos, se mantiene en espera de aprobación. 

“Estamos buscando que los estudiantes sean diversificados y se sientan motivados a ser profesionales titulados con capacidad de desarrollo en la sociedad”. 

Además, enfatizó la relevancia de las prácticas educativas dentro de las aulas para que los estudiantes tengan un acercamiento al mundo laboral real y puedan transformarlo en ingresos propios. 

Estas propuestas van enfocadas en la reinserción educativa del 40 % de estudiantes que desertaron entre el 2018 y 2021, según Aula Abierta.

De igual manera, expresó que las universidades deben “dejar de ser islas aisladas a la educación media”, para que pueda existir una relación mancomunada entre ambas, a fin de impulsar a los estudiantes en su camino académico. 

“Las universidades tienen que estar conectadas a las necesidades de educación básica, incluyendo a los propios docentes, porque pueden ser un espacio propicio para los bachilleres, con planes de formación, campamentos de involucramiento en las áreas o especialidades que tenga la universidad”, insistió Juárez. 

Esto, con la finalidad de incentivar a los estudiantes y explicarle los procesos universitarios, para que conozcan las carreras y sus posibilidades laborales. 

“Hay poca orientación en educación media a los estudiantes sobre los planes universitarios y las carreras, todos son procedimientos aislados que no les permiten a los estudiantes crear un plan de estudio”. 

Esto también se debe a la falta de estructuras sociales desarrolladas que les brindan un espacio adecuado a los alumnos, como por ejemplo docentes formados con capacitaciones actualizadas, debido a que por falta de salarios y condiciones óptimas para su labor, tanto de infraestructura como acompañamiento, también se ha registrado la deserción de docentes entre 50 y 55 %, según la Federación Venezolana de Maestros. 

Relación de las universidades con la educación media

“La educación es el camino y tránsito que permitirá tener una Venezuela distinta y estable, que proporcionará tener condiciones de desarrollo y estabilidad”, asegura el decano, pero cada vez hay menos ciudadanos que quieren ser docentes. 

Por lo que afirma que hay que crear campañas que motiven a los estudiantes de bachillerato a participar en la formación de la docencia, pero para eso se debe invertir en el sector de educación, a propósito de ofrecer las mejores condiciones, no solo salariales, sino también el acompañamiento a la formación permanente del docente.

En el aspecto social, hay un reconocimiento a medias de lo que hace el docente, pero es “un sentimiento contradictorio, porque siempre se dice que los maestros son unos héroes, pero yo no quiero ser un maestro, y eso se debe a cómo se ha dejado de invertir en los docentes, en sus necesidades, espacios y salarios”.  

“Hay que demostrarle a la sociedad que los docentes son profesionales necesarios y vitales, son el corazón y pulmón para la sociedad”, expresa Juárez. 

Es por ello que la autoridad educativa reafirma que “la Ucab tiene mirada en la realidad con un pie en el futuro”, porque están conscientes de la necesidad de diferentes sectores sociales del país, pero participan activamente para realizar un cambio. 

Internacionalización y flexibilidad curricular en la Ucab

Como parte de sus retos y acciones para este 2022, en contexto pandemia, se concentrará en un reglamento que permita ordenar la vida académica en los próximos años, con la explicación del tipo de modalidad a implementar a partir de la experiencia virtual. 

Por esta razón, tomarán las clases virtuales como una oportunidad para internacionalizar los pensum y permitir la transversalidad curricular. 

La meta de la Ucab es poder involucrar a los ucabistas con otras universidades del exterior, por medio de vínculos para ingresar a otras materias que no estén contempladas en su síntesis curricular y puedan incluirse como electivas. 

Además de incorporar clases mixtas entre facultades, materias que se incluyan como comunes con otras carreras y que los estudiantes complementen su formación profesional. 

Esto como parte del plan estratégico 2022-2023 de la Ucab que se relanzó este 2021, retrasado por la pandemia, que permite actualizar los planes curriculares a los tiempos actuales. 

Seres pensantes y críticos

El decano manifestó que no solo se necesitan profesionales, sino profesionales integrales, seres críticos y pensantes que permitan desarrollar una sociedad democrática. 

“Este es el rol de las humanidades en las carreras universitarias”, dijo, porque no solo se puede afirmar que “la educación permite el desarrollo de las sociedades”, sino que a partir de una educación equilibrada, que exista un híbrido entre lo técnico, práctico y humano, se podrán “crear sujetos que defiendan la forma de vida de la democracia”.

Es por ello que, asegura que “las humanidades son y seguirán siendo el mecanismo de poder enfrentar los totalitarismos, las falsas democracias y todo el sistema de gobierno que va en contra de los derechos humanos”.

“Si tenemos sistemas educativos debilitados, pobres, es muy fácil que se imponga un totalitarismo”, añadió.

Es necesario tener un plan de formación actualizado con miras al futuro, a la evolución, aprendiendo del pasado para no seguir cometiendo los mismos errores. Esta evaluación realizada por las autoridades educativas de la Ucab es lo que permite que se puedan implementar estrategias asertivas que influyan en los conocimientos de los estudiantes. “Creemos en el país, confiamos en que podemos aportar”, subrayó.

 

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