Maltrato animal: La cruel realidad de los que no tienen voz

Aunque es considerado como un delito, en Ciudad Guayana los casos de maltrato animal se han convertido cada vez en algo más frecuente; las numerosas manadas de perros y gatos comunitarios son una de las más notables pruebas de ello, pero ¿por qué causar daño a seres que solo dan amor incondicional?, se preguntan las personas a quienes les preocupan el descuido y el abandono de las que estos han sido víctimas.

Lamentablemente, también como ejemplo de la existencia de una población que atenta contra animales que son indefensos, es posible tomar el reciente caso de Cody, un perrito agredido a machetazos por dos personas que en septiembre de este año detuvo la Policía Municipal de Caroní.

Con fuertes lesiones en su cuerpo, fue atendido por médicos veterinarios pertenecientes a la Misión Nevado, además de recibir apoyo de otros proteccionistas independientes que se preocuparon por su bienestar.

Aunque lograron su recuperación, y los responsables de sus daños fueron capturados, al ser devuelto a su comunidad en Villa Venezuela, el 23 de octubre Cody fue encontrado muerto junto a otros cuatro perros, presuntamente envenenados.

Como ellos, otros animales han sido víctimas del comportamiento irracional de algunas personas, que contrario a darles el amor y la protección que se merecen, causan su sufrimiento e incluso la muerte.

Llenos de amor

“Ellos están para hacer compañía, (…) son parte de la familia”, comenta María Antonieta Sánchez, proteccionista independiente que durante más de una década se ha encargado de mejorar la calidad de vida de animales en situación de calle.

Haciendo recuento de las dificultades a las que se enfrentan los perros abandonados, menciona que deben sobrellevar el hambre y la sed, además de ser vulnerables a enfermedades, al rechazo de las personas, y a sufrir incluso por las condiciones climáticas: el calor que quema sus patitas, la lluvia de la cual a veces no pueden ampararse.

“Un animalito sufre, siente y padece como nosotros, la diferencia es que ellos no hablan”, manifiesta sobre la necesidad de que todas las personas aporten “un grano de arena” para lograr el objetivo de disminuir la cantidad de perros y gatos abandonados en las calles o maltratados en sus hogares.

Al igual que ella, Daniela Huber, miembro de la Pandillita Animalista, resalta la importancia de la esterilización para disminuir la sobrepoblación de animales comunitarios, ya que muchos de ellos son víctimas de rechazo inclusive desde su nacimiento.

“Si los dejan en la calle el riesgo que van a correr es muy grande y las consecuencias van a ser fatales, porque los animales dependen mucho de las personas”, afirma Sánchez.

Maltratar es delito

Ledcerv Hernández, coordinador regional de Misión Nevado en el estado Bolívar, resalta que toda acción que genere dolor o sufrimiento a un animal es considerada como maltrato.  Esto incluye la limitación de espacio o movilidad, condiciones de higiene inadecuadas, la venta ambulante de fauna doméstica, el abandono y aquellas que generen la muerte.

Por esta razón, señala que dentro de las leyes venezolanas, el artículo 438 del Código Penal sanciona con arresto de ocho a cuarenta y cinco días a quien “haya matado a un animal ajeno o le haya causado un mal que lo inutilice”.

De igual manera, el artículo 537 menciona que “el que cometa crueldades con los animales, los maltrate sin necesidad o los someta a trabajos manifiestamente excesivos, será penado con multa de hasta cien unidades tributarias”.

Sin embargo, Hernández manifiesta que actualmente buscan que las leyes sean modificadas para aumentar las sanciones a quienes cometan este delito.

Sobre los médicos veterinarios, advierte del intrusismo que se mantiene presente en la profesión y pone en riesgo el bienestar de los animales, por lo que es necesario asegurarse de que el especialista cuente con un sello y firma que demuestren su registro dentro del Colegio.

“Falsos médicos veterinarios han sido aprehendidos, las personas tienen que verificar que realmente lo sean”, menciona.

En cuanto a las denuncias de maltrato, Misión Nevado, el Ministerio Público y la Policía Municipal de Caroní son los entes receptores en Ciudad Guayana. Para presentarlas, es necesario hacer un “seguimiento” del caso, y contar con pruebas de lo que ocurre.

Ser proteccionista

Las voluntarias aseguran que cada persona puede convertirse en una esperanza para un animal que sufre maltrato, todo depende de la verdadera intención de ayudarlos.

“La gente tiene como miedo de hacerlo (rescate), ellos son los seres más hermosos, dicen que son agresivos, pero hay que perder el miedo”, insiste Huber en la posibilidad de que desde cada comunidad se brinde alimento a los animales en situación de calle.

Siempre que las condiciones lo permitan, indica que también sería una gran ayuda rescatar a un animal que ha sido abandonado, ya que “lo mejor es el amor porque con eso se adaptan, te hacen caso (…) es algo muy bonito y transmiten mucha alegría”.

Desde La Pandillita Animalista, casi 30 perros han sido rescatados este año, a pesar de que son un pequeño grupo de voluntarias que desde su alcance económico se encargan de alimentar, esterilizar, y atender la recuperación de estos animales en situación de calle, para que luego puedan tener una nueva familia a través de la adopción.

Por su parte, María Antonieta Sánchez ha desarrollado también este año una campaña de concientización a través de murales en la ciudad con los que busca ofrecer mensajes sobre el maltrato animal, el abandono, la adopción y el cuidado para evitar atropellos.

Ambas proteccionistas destacan la importancia de cuidar a los animales, lo cual implica -entre otras cosas- evitar atarlos, cumplir con sus vacunas, alimentarlos adecuadamente, no dejarlos solos en las calles y necesariamente colocar placas de identificación en el collar que porten.

“Ojalá todos abran un espacio en su corazón, con cambiarle la vida a un perrito hacen mucho y dejan mucho que hablar en forma positiva”, manifiesta Sánchez sobre la esperanza de que juntos sea posible generar un cambio en la sociedad.

Violencia causa más violencia

La violencia familiar está vinculada también con el maltrato animal. Por esta razón, las voluntarias hacen un llamado a tomar conciencia desde cada hogar ya que “la educación empieza por casa y esto tiene que frenarse desde casa”.

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