Conoce estos datos curiosos sobre José Gregorio Hernández
José Gregorio Hernández Cisneros es conocido por su legado científico y su ejemplo de devoción cristiana que lo llevó a los altares.
Pero hay ciertos datos curiosos en torno a la vida del beato, que sus devotos deben conocer. Además de sus conocimientos de medicina y teología, José Gregorio era políglota: dominaba el inglés, francés, alemán, italiano, portugués, también tenía conocimientos de latín y hebreo.
Según varios autores de biografías de José Gregorio Hernández, dominaba el piano y también podía interpretar la flauta y en violín. Dicen que le gustaba cantar y además se interesó por el mundo de la pintura, tanto que realizó dos obras para su disfrute propio.
El beato aprendió el trabajo de sastre, oficio que adquirió de un amigo y gracias a eso confeccionó algunos trajes para sí mismo.
Familia
José Gregorio Hernández no se casó pero se dice que tuvo interés por varias mujeres durante su juventud. Se enamoró de Mará Gutiérrez Azpúrua pero no fue correspondido. Más adelante se interesó por una joven de apellido Elizondo, según el libro “Se llamaba José Gregorio Hernández”, del padre Francisco Javier Duplá.
En su familia se profesaba la religión católica, José Gregorio era descendiente del Santo Hermano Miguel, por el lado paterno; y del cardenal Francisco Jiménez de Cisneros, en el materno.
De su madre heredó la devoción por la religión católica. Intentó en dos oportunidades dedicarse a la vida religiosa, pero su salud le impidió continuar y tuvo que regresar a Venezuela y continuar sus labores como médico.
Una de sus hermanas murió a los siete meses de vida. Su hermano José Benjamín falleció a los 24 años de edad, tras enfermarse de fiebre amarilla.
Pedro Luis, otro de los hermanos de José Gregorio, se murió un año antes que el beato.
Josefa Antonia Cisneros, madre de José Gregorio, murió después de su último parto cuando él tenía apenas ocho años de edad.
Su padre, Benigno Hernández, falleció cuando José Gregorio tenía 26 años y estaba estudiando en Francia.
Medicina
La medicina no fue su primera opción, José Gregorio Hernández escogió esta carrera porque su padre le pidió que lo hiciera. El trujillano pensaba estudiar derecho.
Es conocido como el “médico de los pobres” porque dedicaba un momento de cada día para atender a los enfermos que no contaban con recursos económicos.
A algunos pacientes les donaba el dinero para costear sus tratamientos.
José Gregorio Hernández Cisneros murió el 29 de junio de 1919, era el aniversario de su graduación de medicina y un día antes se había firmado el Tratado de Versalles.
Hernández falleció tras impactar su cabeza contra la acera después de ser arrollado por un vehículo en el sector La Pastora, en Caracas.
El beato habría exclamado durante su caída “¡Virgen santísima!”, lo cual habría sido parte de sus últimas palabras.
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