Consumidores adquieren “de poquito” productos de charcutería

Los altos costos de los productos han obligado a los consumidores a tener que adaptarse a adquirir lo necesario debido a los bajos ingresos que perciben, y los alimentos de charcutería no son la excepción.

Este rubro ha dejado de ser una prioridad para los guayaneses y solo compran lo necesario.

PRIMICIA durante un recorrido por algunos negocios de San Félix, corroboró el precio de estos productos.

El kilo de jamón de pierna, ronda los 10,10 dólares; mientras que el de espalda cocido está entre los 5,90 y los 13,13 verdes, dependiendo la marca.

El jamón ahumado de espalda tipo arepero ($ 8,36) y el de picnic ($ 9,34),

El kilo de queso amarillo y de tipo guda, supera los 20,00 dólares, dependiendo de la marca del producto lácteo.

Otros como el mozarella ($ 9,94); de búfala ($ 11,20) y napolitano ($ 9,90), son otras variedades de quesos que están a disposición del consumidor.

Buscan charcutería económica

A pesar de los costos, los usuarios optan por comprar los rubros más asequibles como el queso duro para rallar, el cual oscila los 5,90 dólares por kilo.

Sin embargo, varios locales ofrecen bandejas con el producto desde los 2,20 hasta 3,90 dólares, “pensando en el bolsillo de las personas, porque no todos tienen para comprar un kilo de queso”, dijo el charcutero Ángel Mendoza.

Indicó que muy pocos son los que adquieren el kilo del producto debido a su elevado costo.

Muchos consumidores optan por comprar salchichas como una alternativa de charcutería para las comidas.

Hay quienes compran paquetes de cinco unidades por un costo de $ 6,99 o prefieren adquirirlas individualmente por 0,36 centavos de dólar.

Camila Toledo, ve asequible adquirir un paquete de salchichas de 60 unidades por 13,89 dólares, porque rinde varios días.

“Puedo resolver a la hora de preparar el almuerzo, si no tengo carne o pollo para ese día”, afirma.

El pasado 15 de enero, el Ejecutivo nacional anunció que el monto del bono de alimentación para los trabajadores es de $40 indexados a la tasa del Banco Central de Venezuela, y añadió el bono de Guerra Económica como un “paquete salarial”.

Sin embargo, muchas fueron las críticas de inconformidad puesto que, el salario mínimo está en Bs. 130 desde marzo 2022, sin ningún cambio y el bono de Guerra Económica no es aplicable para los trabajadors del sector privado.

Según los datos del Observatorio Venezolano de Finanzas, en enero de 2024 la tasa de inflación se situó en 4,2% mensual.

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