Salvador Pérez llega a 300 jonrones y 1.000 impulsadas

El aficionado de los Filis que atrapó el jonrón número 300 y la carrera impulsada número 1,000 de Salvador Pérez en las gradas del jardín izquierdo y central del Citizens Bank Park no exigió nada a cambio de entregarle la pelota a Pérez tras la derrota de los Reales por 8-6 ante los Filis el sábado por la noche.

Un apretón de manos y una foto rápida con la leyenda de los Reales fueron suficientes después de su noche histórica, conectando dos jonrones para convertirse en el octavo receptor principal (con un mínimo del 75 % de los juegos como receptor) en la historia de las Grandes Ligas en alcanzar los 300 jonrones y el décimo jugador activo en impulsar 1,000 carreras.

Pero Pérez, por supuesto, se aseguró de que el grupo estuviera bien atendido. Le regaló una de sus camisetas de los Reales, guantes de bateo, casco de bateo y más.

Mientras firmaba gorras, Pérez agradeció al grupo por haber acudido al clubhouse visitante y por estar tan dispuestos a devolver la pelota que marcó el hito. Luego los instó a pensar en convertirse en fanáticos de los Reales y les dijo que su equipo, ahora a 6 1/2 juegos del último puesto de Comodín de la Liga Americana, seguirá jugando duro hasta el último out del último juego de la temporada.

“Nunca se sabe”, dijo Pérez. “El béisbol es una locura”. La interacción resumió a Salvy de la mejor manera.

“Hemos hablado bastante sobre el respeto que se ha ganado en la liga y de los jugadores”, dijo el mánager Matt Quatraro. “Lo ves noche tras noche. Es realmente chévere. La forma en que maneja las cosas, la forma en que respeta a los demás también. Hace todo bien”.

“Es alguien a quien esperas que tus hijos se parezcan cuando crezcan”.

El swing de Pérez contra el abridor de los Filis, Taijuan Walker, en la tercera entrada lo colocó en la lista de otros siete receptores que han conectado 300 jonrones: los miembros del Salón de la Fama Mike Piazza, Johnny Bench, Carlton Fisk, Yogi Berra, Gary Carter e Iván Rodríguez, así como el ocho veces All-Star Lance Parrish, quien no está en el Salón de la Fama.

Fue una gran noche para Pérez. No fue una buena noche para los Reales, que anotaron más de tres carreras por tan solo cuarta vez en los últimos 15 juegos, pero no lograron mantener la ventaja contra una alineación implacable de los Filis, reseña Las Mayores en su portal.

Kansas City ha perdido seis de sus últimos siete juegos y cayó por debajo de .500 (74-75) por primera vez desde el 13 de agosto. Sus posibilidades de playoffs, escasas a principios de septiembre, prácticamente se han evaporado en una carrera por el Comodín de la Liga Americana que se ha apretado en torno a cuatro equipos, dejando atrás a los Reales.

Pérez hubiese preferido una victoria tras alcanzar los hitos.

“Me sentiría mejor si hubiéramos ganado el partido esta noche”, dijo Pérez. “Creo que todos en este deporte tenemos objetivos personales. Pero siempre digo que lo más importante es ganar. No importa lo que hagas. Al final, se trata de ganar o perder. No se trata de ti… Le doy gracias a Dios por permitirme jugar el deporte que me encanta, competir todos los días. Pero me habría sentido mejor si hubiéramos ganado esta noche”.

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