Dejan en libertad a jugadores de rugby acusados de abuso sexual
La justicia de la provincia argentina de Mendoza dejó el lunes en libertad a los jugadores de la selección francesa de rugby Oscar Jegou y Hugo Auradou acusados de la violación de una mujer, aunque ambos deberán permanecer en el país mientras el proceso judicial sigue su curso.
Gonzalo Nazar, Fiscal Adjunto en lo Penal, consideró en una resolución que no hay “elementos de convicción suficientes” para que los jugadores sigan cumpliendo prisión domiciliaria en la ciudad de Mendoza —1.000 kilómetros al oeste de Buenos Aires- luego de estimar que existen contradicciones en el relato de la denunciante.
Jegou y Auradou, de 21 años, están acusados de abuso sexual con acceso carnal agravado por la participación de dos personas contra una mujer mayor de edad en un hotel de Mendoza —capital de la provincia homónima— el 7 de julio, luego de que ambos jugadores de Le Bleus disputarán un partido contra Los Pumas argentinos.
En un primer momento estuvieron detenidos en dependencias del poder judicial y desde mediados de julio cumplieron prisión domiciliaria en una vivienda de la capital mendocina.
El fiscal apuntó en su resolución a las “notorias contradicciones, inconsistencias, zonas grises y hasta explicaciones insuficientes” de la declaración incriminatoria de la denunciante y mencionó el “tono jocoso” de la conversación telefónica que mantuvo con una amiga el día que denunció los hechos, peritada por los investigadores.
En su escrito, dirigido a la Unidad Fiscal de Delitos contra la Integridad Sexual, Nazar destacó la “necesidad de disponer el recupero de la libertad” de los imputados “disponiéndose la conservación del resto de las medidas”, como la retención de sus pasaportes, la prohibición de su salida del país para asegurar que queden sujetos al proceso judicial y la prohibición de contacto con la denunciante.
La mujer conoció a los dos franceses en una discoteca la noche después del partido y, según relató, el ataque habría ocurrido la madrugada del domingo en una habitación del hotel Diplomatic de la capital mendocina. La denunciante aceptó someterse a pericias físicas.
Los acusados dijeron que tuvieron relaciones sexuales consentidas con ella.
Se desconoce dónde residirán de ahora en más los rugbiers, aunque Germán Hnatow, uno de sus abogados, señaló que por ahora permanecerán en Mendoza.
Hnatow también dijo a periodistas que “tres fiscales de diferente jerarquía” analizaron el expediente y “la libertad se ordena porque no hay mérito suficiente para mantener el estado detención que se ordena al comienzo de una investigación penal preparatoria, cuando existe un grado de sospecha”.
El otro abogado de los jugadores es Rafael Cúneo Libarona, hermano del ministro de Justicia de Argentina, Mariano Cúneo Libarona.
Aunque criticó la medida de obligarlos a permanecer en Argentina, Hnatow afirmó la defensa lo aceptará sin plantear apelaciones.
En tanto, la abogada de la denunciante, Ana Natacha Romano, cuestionó que la medida fuera tomada de forma acelerada, cuando todavía no ha sido realizadas las pericias psicológicas a la mujer y a los dos imputados.
La letrada dijo a medios de prensa que su defendida y familiares creen que los acusados “tienen beneficios y privilegios diferentes a los que pueden tener cualquier imputado investigado por esta clase de delitos”.
El delito por el que los rugbiers están acusados contempla una pena máxima de 20 años de prisión.
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